PUPURRI DE LAS BELLAS IMAGENES Y POEMAS CORTOS...., PARA TI... PUEDES.COPIAR...
La fantasia es una bella forma de expresion...he querido entregar mi mundo de fantasia y tambien realidad...poemas... imagenes...reflrexiones.atte.luciernaga
domingo, 16 de julio de 2017
LAS MARIPOSAS ... UN POEMA PARA TI.
Poema
" Las Mariposas "
de Manuel Gutierrez Najera
Ora blancas cual copos de nieve,
ora negras, azules o rojas,
en miríadas esmaltan el aire
y en los pétalos frescos retozan.
Leves saltan del cáliz abierto,
como prófugas almas de rosas
y con gracia gentil se columpian
en sus verdes hamacas de hojas.
Una chispa de luz les da vida
y una gota al caer las ahoga;
aparecen al claro del día,
y ya muertas las halla la sombra..
ora negras, azules o rojas,
en miríadas esmaltan el aire
y en los pétalos frescos retozan.
Leves saltan del cáliz abierto,
como prófugas almas de rosas
y con gracia gentil se columpian
en sus verdes hamacas de hojas.
Una chispa de luz les da vida
y una gota al caer las ahoga;
aparecen al claro del día,
y ya muertas las halla la sombra..
¿Quién conoce sus nidos ocultos?
¿En qué sitio de noche reposan?
¡Las coquetas no tienen morada!…
¡Las volubles no tienen alcoba!…
Nacen, aman, y brillan y mueren,
en el aire, al morir se transforman,
y se van sin dejarnos su huella,
cual de tenue llovizna las gotas.}
¿En qué sitio de noche reposan?
¡Las coquetas no tienen morada!…
¡Las volubles no tienen alcoba!…
Nacen, aman, y brillan y mueren,
en el aire, al morir se transforman,
y se van sin dejarnos su huella,
cual de tenue llovizna las gotas.}
Tal vez unas en flores se truecan,
y llamadas al cielo las otras,
con millones de alitas compactas
el arco iris espléndido forman.
Vagabundas, ¿en dónde está el nido?
Sulamita, ¿qué harén te aprisiona?
¿A qué amante prefieres, coqueta?
¿En qué tumbas dormís, mariposas?
y llamadas al cielo las otras,
con millones de alitas compactas
el arco iris espléndido forman.
Vagabundas, ¿en dónde está el nido?
Sulamita, ¿qué harén te aprisiona?
¿A qué amante prefieres, coqueta?
¿En qué tumbas dormís, mariposas?
¡Así vuelan y pasan y expiran
las quimeras de amor y de gloria,
esas alas brillantes del alma,
ora blancas, azules o rojas!
¿Quién conoce en qué sitio os perdisteis,
ilusiones que sois mariposas?
¡Cuán ligero voló vuestro enjambre
al caer en el alma la sombra!
las quimeras de amor y de gloria,
esas alas brillantes del alma,
ora blancas, azules o rojas!
¿Quién conoce en qué sitio os perdisteis,
ilusiones que sois mariposas?
¡Cuán ligero voló vuestro enjambre
al caer en el alma la sombra!
Tú, la blanca, ¿por qué ya no
vienes?
¿No eres fresco azahar de mi novia?
Te formé con un grumo del cirio
que de niño llevé a la parroquia;
eres casta, creyente, sencilla,
y al posarte temblando en mi boca
murmurabas, heraldo de goces,
«¡Ya está cerca tu noche de bodas!»
vienes?
¿No eres fresco azahar de mi novia?
Te formé con un grumo del cirio
que de niño llevé a la parroquia;
eres casta, creyente, sencilla,
y al posarte temblando en mi boca
murmurabas, heraldo de goces,
«¡Ya está cerca tu noche de bodas!»
¡Ya no viene la blanca la buena!
¡Ya no viene tampoco la roja,
la que en sangre teñí, beso vivo,
al morder unos labios de rosa!
Ni la azul que me dijo: ¡poeta!
¡Ni la de oro, promesa de gloria!
¡Es de noche… ya no hay mariposas!
¡Ya no viene tampoco la roja,
la que en sangre teñí, beso vivo,
al morder unos labios de rosa!
Ni la azul que me dijo: ¡poeta!
¡Ni la de oro, promesa de gloria!
¡Es de noche… ya no hay mariposas!
¡Ha caído la tarde en el alma!
Encended ese cirio amarillo…
¡Las que tienen las alas muy negras
ya vendrán en tumulto las otras,
y se acercan en fúnebre ronda!
¡Compañeras, la pieza está sola!
Si por mi alma os habéis enlutado,
¡Venid pronto, venid mariposas!
Encended ese cirio amarillo…
¡Las que tienen las alas muy negras
ya vendrán en tumulto las otras,
y se acercan en fúnebre ronda!
¡Compañeras, la pieza está sola!
Si por mi alma os habéis enlutado,
¡Venid pronto, venid mariposas!
sábado, 15 de julio de 2017
CANDELITA, LA ULTIMA LUCIERNAGA , CUENTO
CANDELITA
LA ULTIMA LUCIERNAGA (CUENTO).
Candelita, era una pequeña luciérnaga, muy, muy pequeña. Esto quizás no tendría mayor importancia, si no fuera porque era la última luciérnaga.
No había ya ninguna otra en este mundo que le explicara los por qué de las cosas, menos aún que le respondiera a su eterna pregunta sobre el por qué de su propia existencia.
No había ya ninguna otra en este mundo que le explicara los por qué de las cosas, menos aún que le respondiera a su eterna pregunta sobre el por qué de su propia existencia.
Sólo sabía que podía dormir plácidamente durante todo el día y debía despertar con el primer silencio de la noche. Y así lo hacía, aunque no había nadie para reconocerle el mérito. Bien mirado, tampoco hacía nada de particular para merecerlo.
miércoles, 12 de julio de 2017
Luciernaga al atardecer: HISTORIA DE LUCIERNAGAS, EN UN PAIS MUY LEJANO.
Luciernaga al atardecer: HISTORIA DE LUCIERNAGAS, EN UN PAIS MUY LEJANO.: QUE LAS LUCIERNAGAS NO DEJEN NUNCA DE ILUMINAR EL MUNDO ¿¡Has escuchado alguna vez a las luciérnagas? ¿ Sabías que, en Sierra Leone, e...
HISTORIA DE LUCIERNAGAS, EN UN PAIS MUY LEJANO.
¿¡Has escuchado alguna vez a las luciérnagas? ¿ Sabías que, en Sierra Leone, en un pueblo muy pequeño llamado Perie Bo, rodeado de una belleza natural incomparable, las luciérnagas desprenden una luz mágica encantadora ? Donde sea que estés, si alguna vez ves luciérnagas, pregúntales por Perie Bo. ¡ Ellas te contaran su secreto !
Entre cocos, plátanos, piñas, guayabas y tantas otras frutas y verduras propias de climas tropicales, las luciérnagas alzaban su vuelo, cargadas de esa luz extraordinaria que las caracteriza.
Cuando llegué a Perie Bo, después de un agotador trayecto, lo primero que hice fue dejar la mochila y sentarme a descansar en la primera silla que encontré. Mientras reposaba, de forma casi inconsciente, levante la vista. Seria más o menos al atardecer, cuando los pequeños rayos del último sol, y ya a finales de la estación lluviosa, cubrían con su manto dorado la plenitud de la selva. No me dio tiempo a terminar el siguiente suspiro.
De repente, decenas y decenas de luciérnagas empezaban a dejarse entrever. Nunca antes había presenciado semejante espectáculo. ¿ y tu? ¿ alguna vez has estado tan cerca de ellas?
Sin abrir la boca, y sin llegar a parpadear, observaba con atención su plácido vuelo. La incandescencia de su luz dibujaba un trayecto perfecto, claro, preciso.
A lo alto y ancho de la selva, las palmeras, los cocoteros, los plataneros….dibujaban fascinantes sonrisas. En ese momento e instante me sentía afortunado de poder formar parte de esa maravilla natural, de estar presente en el preciso momento de su vuelo.
Al caer la noche, algunas de las luciérnagas más jóvenes se acercaron hacia mi un tanto preocupadas. Aunque vivían en un espacio repleto de energía donde cargar su luz, parecía que otros seres intentaban quitarles sus medios básicos para seguir cargando su luz mágica.
« Por la noche nos cuesta dormir, nos caen gotas del tejado cuando llueve », « tenemos miedo, nuestros hermanos y hermanas dentro de la barriga de mamá, no sabemos si nacerán bien o no », « dicen que vivimos en un lugar con muchas riquezas, pero unos hombres vienen a quitárnoslas y nos dejan sin nuestra energía »…escuchaba éstas y otras frases con infinita tristeza y preocupación.
No pude contener seria inquietud por lo que me contaron. Sobretodo, después de la bienvenida que me dieron. Sobretodo, después de presenciar como todas las luciérnagas de Perie Bo se concentraron en el la sala de recepción, para, con lo pude contener seria inquietud por lo que me contaron. Sobretodo, después de la bienvenida que me dieron. Sobretodo, después de presenciar como todas las luciérnagas de Perie Bo se concentraron en el la sala de recepción, para, con los brazos abiertos y el corazón predispuesto, iluminar con amabilidad, con alegría, con júbilo, la visita del viajero.
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